Yerma por elección
No recuerdo en qué momento del camino decidí ser una “yerma”. A algunas personas que me conocen desde niña les ha resultado una rareza, sobre todo considerando que jugaba con muñecos, tuve una infancia relativamente normal y unos padres de campeonato. Fui formada como católica y he pasado por el estado civil decente y apropiado … (Leer más)